La Torre del Oro y la Giralda
Sevilla, España. 25 de mayo de 2014

Sevilla es mi ciudad natal, y más de 25 años de mi vida los he pasado en ella, que se dice pronto. Llevaba mucho tiempo queriendo escribir un artículo mezclando sus rincones que más me gustan con lo que yo vería si viajase a ella como turista, y por fin lo he hecho. Ahí va.

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1. Plaza de España y Antiguos pabellones de la Exposición Iberoamericana de 1929. El arquitecto Aníbal González fue el máximo responsable de la remodelación que sufrió Sevilla con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929, aunque él por desgracia no la viese acabada. La Plaza de España, el Casino y los antiguos pabellones de la exposición que quedaron en pie forman parte ahora del atractivo turístico de Sevilla.

2. Jardines de las Delicias, Parque de María Luisa y Plaza de América. Hace poco más de un mes se cumplieron 100 años de la inauguración del Parque de María Luisa, uno de los jardines públicos más grandes de la ciudad y sin duda el más famoso. Dentro hay varias glorietas, como la de Bécquer o la de Dante, y algunos de los antiguos pabellones de 1929. Subir al Monte Gurugú y dar de comer a las palomas en la Plaza de América es algo que todo sevillano ha hecho de pequeño (y de no tan pequeño).

3. Giralda y Catedral de Santa María de la Sede. La Giralda, la torre de 104,1 m de altura de la catedral, es el símbolo de la ciudad, y para subir a lo más alto no hay escaleras sino una rampa. La catedral gótica es una de las más grandes del mundo y tiene mil cosas que ver, como el Patio de los Naranjos, el Altar Mayor, las capillas y la tumba de Cristóbal Colón.

4. Archivo General de Indias, Plaza del Triunfo y Plaza de la Virgen de los Reyes. Al lado de la Catedral está el Archivo de Indias, en donde se encuentra toda la documentación existente de las colonias españolas en América, casi ná. Las Plazas del Triunfo y de la Virgen de los Reyes separan la Catedral, el Archivo de Indias y el Alcázar, conjunto declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987. Es decir, el lugar en el que se concentran la mayoría de los turistas.

5. Reales Alcázares. Un palacio y unos jardines únicos rodeados de murallas y realizados en gran variedad de estilos, desde el mudéjar al barroco. La visita al Alcázar de Sevilla da para mucho, es recomendable estar allí a primera hora (las colas suelen ser larguísimas) y reservarle gran parte de la mañana. Un dato: es el palacio real en uso más antiguo de Europa.

6. Paseo de Catalina de Ribera y Jardines de Murillo. Otro de mis paseos favoritos (hay muchos, lo sé). Estos terrenos pertenecían al Alcázar, y se cedieron como jardines públicos a mediados del s. XIX. Lo mejor: la vegetación y el monumento a Colón.

7. Barrio de Santa Cruz. Es difícil descubrir todos los rincones de la antigua judería de Sevilla, de hecho hasta algunos sevillanos nos perdemos a veces por ella. Recomiendo hacer un alto en el camino y tomar algo en la Plaza de Doña Elvira o en el cruce entre el Callejón del Agua y la Calle Vida (aceptando previamente que por esta zona los precios están «un poco» inflados).

8. Avenida de la Constitución y Puerta de Jerez. Una de las calles más importantes de la ciudad, que lleva desde los Jardines de Cristina y la Puerta de Jerez hasta el Ayuntamiento, pasando por la Catedral y el Archivo de Indias. Aparte de lo ya nombrado, hay varios edificios en ella que merecen la pena, como La Adriática y la Oficina central de Correos.

9. Palacio de San Telmo y Jardines de Cristina. La Presidencia de la Junta de Andalucía se encuentra en este gigantesco palacio barroco, y desde su restauración se pueden visitar sus jardines con una visita guiada. A su lado, los Jardines de Cristina forman un pequeño parque recientemente reformado con varios monumentos, y si queréis descansar un rato y comer algo a la sombra de los árboles sin gastar mucho dinero, hay un McDonald’s justo al lado.

10. Torre del Oro, Muelle de la Sal y Plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería. A orillas del río Guadalquivir, la Torre del Oro es otro de los símbolos de Sevilla, y alberga el Museo Naval. Muy cerca de ella, en el Paseo Colón, se encuentra la Plaza de Toros, con una de las fachadas (para mi gusto) más bonitas de la ciudad.

11. Puente de Triana y Calle Betis. El Puente de Isabel II, más conocido como Puente de Triana, cruza el río Guadalquivir y une el barrio de Triana con el centro de la ciudad, justo donde se encuentra el Muelle de la Sal. La Calle Betis (que no se llama así por el equipo de fútbol sino por el antiguo nombre romano del Guadalquivir, aunque algún que otro sevillano os dirá lo contrario) recorre el río desde el Puente de Triana hasta el barrio de Los Remedios. Otro paseo típico e imprescindible, junto con parar allí a tomar una cerveza en alguno de los quioscos.

12. Casa de Pilatos. Ni fue la casa de Pilatos, ni Pilatos estuvo nunca en Sevilla. Este impresionante palacio (desconocido para la mayoría de los sevillanos, por desgracia) pertenece a los Duques de Medinaceli. ¿Quéreis saber cómo es un palacio andaluz? Entrad, que además los miércoles es gratis. La historia de su nombre y lo que se encuentra en su interior espero contarlo detalladamente en un futuro artículo.

13. Alameda de Hércules. La Alameda es mi lugar favorito de Sevilla en el que reunirme para salir por las noches, y es habitual encontrarse allí conciertos o mercados temáticos. En sus extremos hay cuatro columnas, dos en el norte con leones, y otras dos en el sur coronadas por Hércules y Julio César.

14. Puente de la Barqueta y Puente del Alamillo. El Puente de Triana es el más antiguo de Sevilla, pero tras él los dos más conocidos son el de la Barqueta y el del Alamillo, que se construyeron para la Expo92. El paseo a orillas del río que hay entre ambos es el mejor sitio para salir a correr de toda la ciudad, junto con el Parque de María Luisa.

15. Las iglesias. En Sevilla hay muchas iglesias, muchísimas, y la mayoría de ellas son obras maestras de la arquitectura. Si os gusta visitar iglesias, verlas todas es imposible, sobre todo teniendo en cuenta la gran cantidad de patrimonio artístico que tienen dentro. Yo recomiendo ver al menos las que más me gustan: El Salvador, San Luis de los Franceses, La Magdalena y San Ildefonso.

16. La arquitectura. Sevilla está llena de palacios y edificios civiles en los que pararse a ver cada detalle. Los que más me gustan (de los que no he hablado todavía) son el Palacio del Marqués de la Motilla cerca de la Plaza de la Campana y el Edificio Pedro Roldán en la Antigua Plaza del Pan.

17. Metropol Parasol, o Setas de la Encarnación. A mi las Setas me parecen horribles, todo sea dicho, más que nada por su emplazamiento, pero parece ser que se han convertido en una de las principales atracciones turísticas de Sevilla y ya no hay web de viajes extranjera que no hable de ellas. Se puede subir arriba y dar un paseo, pero para vistas yo preferiría subir a la Giralda…

Me dejo muchas cosas por el camino, sobre todo las zonas de la Calle Sierpes y la Macarena, pero no encuentro fotos a mano así que en un futuro, espero que cercano, completaré lo que falta.

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1. Museo Arqueológico. Mi museo favorito de Sevilla con diferencia. Dentro se encuentran la mayor parte de las obras de arte que aparecieron en las Ruinas de Itálica, como la estatua del Emperador Trajano, así como varias piezas de origen tartésico y el Tesoro del Carambolo. Una maravilla.

2. Museo de Bellas Artes. El museo de pintura de Sevilla y uno de los más importantes de España. Dentro hay obras de Valdés Leal, Murillo y Zurbarán, tres de los pintores más importantes del barroco sevillano. Es impresionante la sala que ocupa lo que en su día fue la antigua iglesia del Convento de la Merced.

3. Museo de Artes y Costumbres Populares (Pabellón Mudéjar). Al igual que el Museo Arqueológico, este museo se encuentra en la Plaza de América, y lo más interesante de él son las reconstrucciones de antiguos talleres de artesanía. Está dentro de uno de los edificios más bonitos de Sevilla: el Pabellón Mudéjar.

Hasta aquí todo lo referente a Sevilla, pero si queréis alquilar un coche algún día o coger el tren y hacer alguna excursión, aquí van algunas ideas.

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1. Santiponce (15km). En Santiponce están las ruinas de la ciudad romana de Itálica, lugar de nacimiento de los emperadores Adriano y Trajano. Itálica y el Monasterio de San Isidoro del Campo hacen que Santiponce sea el primer lugar al que yo iría a pasar una buena mañana de turismo.

2. Osuna (87 km). Osuna es una de las localidades con más patrimonio histórico de toda la Provincia de Sevilla. Lo mejor de ella: la Colegiata, la Universidad y la Plaza Mayor.

3. Cádiz (123 km). Una de las ciudades que más me gustan de España, sobre todo por su ubicación, su estructura única y su original catedral. Tengo ganas de volver algún día a visitarla a fondo.

4. Ronda (128 km). La última vez que pisé Ronda fue en 2004, pero me parece que fue ayer, ya que es imposible olvidar el Tajo y su Puente Nuevo. Otro lugar al que tengo que volver pronto.

(Foto: Stefano Gambassi)

5. Córdoba (141 km). Córdoba bien se merece un artículo (y un viaje) ella sola, y en el futuro lo escribiré, pero si vuestra aventura se centra en Sevilla y algún día suelto queréis visitar otra ciudad, Córdoba es la mejor opción.

6. Mérida (191 km). La espectacular Mérida descansa sobre las ruinas de la ciudad romana de Augusta Emerita. El anfiteatro y el teatro, el Templo de Diana y el Acueducto de los Milagros son las atracciones principales, junto al imprescindible Museo Nacional de Arte Romano. Visita temática como ninguna.

7. Gibraltar (198 km). Al igual que Mérida, Gibraltar está ya un poco lejos de Sevilla como para considerarla una excursión viable, pero el Peñón, el llanito y las carreteras que cruzan el aeropuerto la hacen única en todos los sentidos.