Día 8
Monasterios de Meteora
El día que dediqué a Meteora empezó de una manera un tanto especial. Llegué a uno de los puntos de observación casi una hora antes del amanecer y pude ver de manera fortuita algo que en mis 32 años de vida nunca me había planteado contemplar: una puesta de luna llena. Tras desaparecer ésta por el horizonte, empezó a clarear el día y poco a poco los rayos de luz fueron bañando el valle, iluminando las rocas y perfilando las siluetas de los míticos monasterios bizantinos que se erigen sobre éstas. Estuve solo prácticamente todo el tiempo, salvo un momento concreto en el que un coche apareció a toda prisa y un señor de nacionalidad china bajó de éste, cámara y trípode en mano, subió como alma que lleva el diablo hasta donde yo estaba, me saludó (aquí fue cuando descubrí su origen), hizo varias fotos aparentemente a contrarreloj, se largó corriendo, y arrancó el coche de nuevo. Visto y no visto.
Amanecer en Meteora
Mi fugaz compañero
Amanecer en Meteora
Amanecer en Meteora
De los seis monasterios de Meteora pude visitar cuatro, los que estaban abiertos ese día: el de Gran Meteoro, el de Roussanou, el de la Santísima Trinidad y el de San Esteban. Los otros dos cerraban ese día (cada uno tiene su propio horario, así que es conveniente informarse antes de ir para allá). Disfruté todos y cada uno de los minutos que pasé recorriendo los rincones de Meteora, incluyendo los que dediqué a subir escaleras y cuestas. Cuando me encontré frente al Monasterio de la Santísima Trinidad me sentí como 007 persiguiendo a Julian Glover en aquella película de 1981 llamada Solo para tus ojos (principal causante de que Meteora estuviera en mi primer plan de visita para Grecia desde que tengo uso de razón). Cuando ya me di por satisfecho, volví a Kalabaka, una ciudad cuyo encanto reside en encontrarse a los pies de Meteora (su principal monumento es una iglesia bizantina del s. XIII que también cerraba aquel día, no tuve suerte…).
Monasterio de Varlaam
Monasterio de Roussanou
Monasterio de la Santísima Trinidad
Kalabaka desde Meteora
Meteora desde Kalabaka
Iglesia bizantina de Kalabaka
Contenidos
Que maravilla. Leyendo esta magnífica entrada desde luego te dan muchas ganas de visitar Grecia. Enhorabuena.