Viernes, 6 de marzo de 2015
Mi amigo Manuel me propuso ir a Noia para ver el desfile del carnaval, y claro, a uno le cuesta negarse a la hora de conocer lugares nuevos. Nunca había estado en Noia, a pesar de que está muy cerca de Santiago, así que cogimos el coche y llegamos justo cuando estaba atardeciendo.
Al final no nos quedamos para el desfile, ya que salió más tarde de lo previsto y no queríamos volver a horas intempestivas que al día siguiente partíamos temprano a la Festa da Arribada de Baiona. Sin embargo, aprovechamos muy bien la corta excursión gracias a un más que fotogénico paseo por la parte de la ría de Muros y Noia que baña a esta última. Hacía tiempo que no veía unos colores tan intensos durante el atardecer.
También dimos una pequeña vuelta por el centro de Noia, pero queda pendiente volver y verla tranquilamente, que ya era de noche y el ambiente festivo ocultaba su verdadero día a día.
¡Que bonito! Como siempre,las fotos preciosas.